Publicado el 24 de noviembre de 2021.
Conferencias de Historia
- 13 diciembre: ‘1788-1808, Carlos IV, crisis y revolución‘ (1ª parte)
- 20 diciembre: ‘1788-1808, Carlos IV, crisis y revolución ‘(2ª parte)
- Ponente: Leonardo Bermejo Sáez.
- Dónde: Espacio Caixa. C/ Arapiles, 15 (junto a la plaza del Conde del Valle Suchil).
- Hora: 17:00 h
Estas dos conferencias describirán el reinado del monarca don Carlos de Borbón (Carlos IV), hijo de Carlos III de España. Carlos IV fue un rey sensible a la cultura, gran aficionado a la música y al arte, y un importante mecenas y coleccionista, que aumentó considerablemente la Real Biblioteca.
Sin embargo, no pudo continuar la obra de su padre porque su reinado (1788–1808) coincidió con un mundo en convulsión por la injusticia social, la pobreza y el abuso de las élites aristocráticas y religiosas, que desembocaron en la Revolución Francesa; un mundo donde emergía una potencia alternativa al imperio español, Gran Bretaña, que había conseguido su poder a partir de una Revolución Industrial, basada en la ciencia y la técnica.
La consecuencia fue que el rey Carlos IV y sus gobernantes, se vieron obligados a gestionar, deprisa y con poco acierto, varios conflictos y guerras, dentro y fuera de su territorio:
- Guerra de la Convención (1793-1795), un conflicto entre la Monarquía española y la Primera República Francesa. Una guerra que la Iglesia declaró “guerra santa” y que la reacción supo aprovechar para sus propios fines antiilustrados y antirrevolucionarios.
- Primera guerra contra Gran Bretaña (1796-1802), marcada por la batalla naval del Cabo de San Vicente el día 14 de febrero de 1797. España se encontraba, en aquel momento, unida a la Francia revolucionaria, lo cual la comprometía a enfrentarse con Inglaterra.
- Guerra de las naranjas entre España y Portugal, porque no se cerraban los puertos lusos a los barcos británicos. La guerra comenzó el 19 de mayo de 1801 y duró tres semanas, y acabó con la firma del Tratado de Badajoz.
- Segunda guerra contra Gran Bretaña (1804-1805), marcada por las batallas navales de los cabos de Finisterre y Trafalgar, que desgastaron a la flota franco-española de cara al futuro y establecieron el dominio británico del Atlántico, quedando cortado el comercial colonial español con América.
El final de su reinado se vio ensombrecido por la Conjura de El Escorial (1807) en la que su hijo Fernando y un grupo de nobles trataron de remover su corona para asumirla su hijo, como Fernando VII.
Un año después, nuevamente su hijo y parte de la nobleza consiguieron la abdicación de Carlos IV, poniendo en marcha el llamado Motín de Aranjuez, que elevó a la condición de rey de España a Fernando VII.
Su reinado y el de su hijo terminaron en Bayona, donde les había citado Napoleón Bonaparte, con las llamadas “abdicaciones de Bayona”, en las que Napoleón consiguió situar a su hermano José Bonaparte como Rey de España, de momento, porque el 2 de mayo de 1808 había comenzado en Madrid un levantamiento popular contra la “invasión francesa” de la península ibérica, que conduciría a una guerra que finalizaría en 1814 con la expulsión de los ejércitos franceses y la vuelta al poder de Fernando VII, que envió a España al pozo de la historia, reponiendo una monarquía absoluta anticuada y clerical.
Ha sido una contrariedad que después de acudir al Espacio Caixa no me hayan permitido asistir a la conferencia del día 13. No sabía que había que haberse inscrito en septiembre, según me informaron. Por el mismo motivo tampoco podré asistir a la conferencia del día 20. Espero otra ocasión para cumplir con los trámites. Un saludo.