TRABAJO DEL VERANO 2013
(Memorias de una década 2003-2013)
23 de Septiembre 2013
Querido padre:
Hace ya casi 39 años que nos dejaste, pero para mí sigues estando entre nosotros pues dicen, y yo creo que es así, que mientras se recuerde y se hable de alguien que se ha ido, siempre estará presente.
Han pasado muchas cosas en tu ausencia en estos años. Algunas buenas y otras no tan buenas. Se nos ha ido mucha gente muy querida a la que no olvidamos; algunos muy jóvenes, como tú. Para mí estos, digamos, diez últimos años han sido duros en el sentido de sentirme más huérfana de alguna manera.
Te contaré en general lo acontecido en esta década que, para mí, ha sido muy especial en todos los sentidos.
En este espacio de tiempo hubo una racha especialmente triste. Primeramente se fueron ya todos tus hermanos, mis tíos, siendo su fallecimiento a unas edades a las cuales te hubiera gustado llegar a ti. La marcha de mamá en el 2006 supuso un golpe muy duro a pesar de que por su edad entraba dentro de lo normal, pero me hubiese gustado tenerla siempre conmigo. De alguna manera os tengo a todos y os recuerdo todos, todos los días.
Uno de los mazazos más grandes de mi vida fue la noticia de la muerte de tu nieta, en 2007, mi queridísima sobrina, a la cual he querido como una hija, con 31 años, después de habernos dado la alegría de ser madre y convertirnos en “tíos-abuelos” y a ti en bisabuelo. ¡Con qué ilusión lo hubieses disfrutado! La niña ya ha cumplido siete años y es igual de encantadora que lo era su madre. Otra de tus nietas nos dió otra “sobrinieta” que al igual que la anterior tiene siete años y son más listas que “los hijos de la Etelvina”. Como verás, sigue prevaleciendo el dicho familiar. Fue una lástima que no conocieras tanto a tus nietas como a tus bisnietas.
Mi hermano, mi queridísimo hermano, tu segundo hijo, también nos dejó en el 2010. No soy capaz de expresar de ninguna forma lo que esta pérdida ha supuesto para mí. Sólo yo sé lo que he sentido siempre por él. Para mí ha sido una persona muy especial. Hoy, precisamente cumpliría 68 años. No puedo seguir.
Existen otras razones festivas e importantes en mi vida en estos diez años que me han ayudado sobremanera para poder levantarme tras los duros golpes recibidos en poco tiempo, así que cambiaré de tema pues si no, ésto va aparecer un obituario y nada más lejos de mi intención como verás más adelante.
Hay una razón especial por la que te recuerdo de una manera particular. Se trata de que en el año 2003 nos reunimos unos cuantos amigos a quienes nos unen nuestras aficiones por el teatro, el cine, la cultura en general y pusimos encima de la mesa la idea de fundar una Asociación Cultural. A todos nos pareció una idea estupenda que fuimos transmitiendo entre unos y otros y por fin, exactamente el día 26 de mayo del 2003 nació TROTEA y ¿sabes donde tuvo lugar el alumbramiento? Pues en la calle de Piamonte nº 10 4º izquierda. La casa que tú habitabas cuando conociste a tu vecina que más tarde sería mi madre y en cuya puerta de al lado nací yo. Parece una casualidad, pero ahora y, desde hace muchos años, dicho piso está habitado por un socio nuestro. Se podría decir que para mí fue también mi venida a ese mundo que tanto me ha gustado desde pequeña y que he compartido contigo tantas y tantas noches oyendo en la radio “El Teatro del Aire” y asistiendo juntos al cine y comentando las películas que veíamos. Pertenecer a un grupo de gente con la que de verdad tienes algo que compartir ha sido un regalo y hasta me he atrevido a hacer mis pinitos como actriz. Estoy en un curso de Expresión Teatral impartido en nuestra Asociación, que resulta muy interesante. Al principio me costó bastante soltarme pero ya me he metido de lleno. Me encanta convertirme en otra persona y lo haga mejor o peor, pongo toda la carne en el asador. Se puede decir que he cumplido el sueño que he tenido siempre. Hemos actuado varias veces en el salón de actos del Ateneo que tanto te gustaba. He conocido a gente encantadora e interesante que me ha enriquecido personalmente. Tengo muy buenos amigos.
Somos ya más de 70 socios y, a pesar de que los tiempos que corren no son precisamente de “esplendor en la hierba” y parece que la cultura no es primordial para los que ahora nos gobiernan, aquí estamos todos como una piña para que nuestra Asociación siga su camino. Solicitamos anualmente una subvención a la Comunidad de Madrid, unas veces con éxito, otras a medias y alguna ni lo uno ni lo otro. Cuántas veces pienso en lo que dirías si te hubiese tocado vivir en estos tiempos. Tú que te declarabas desilusionado de tantas cosas después de haberte jugado el tipo en la guerra con sólo 16 años.
Bueno, como nosotros seguimos creyendo en nosotros mismos, seguimos adelante con nuestro teatro, nuestro cine, nuestras conferencias, nuestra poesía (ahí también hago mis pinitos), nuestros viajes culturales y de naturaleza, asistimos en grupo a funciones de Teatro comercial, y también hacemos un calendario desde hace creo que cinco años. La idea fue mía, pasado un tiempo se reconsideró y la pusimos en marcha y llevamos todo ese tiempo amenizando cada año a nuestros socios. Nos disfrazamos de muchas cosas (ya sabes que a mí siempre me ha encantado) y también, ¿por qué no? disfrutamos mucho. Los beneficios de dicho calendario están destinados a nuestras paupérrimas arcas.
Desde hace un par de años pertenezco a la Junta Directiva como Vocal y últimamente me encargo de redactar el Boletín de Noticias mensual y hacer alguna que otra crónica especial de algún evento, viaje, fiesta, etc. La verdad es que me siento muy bien y con suerte de poder estar en un entorno tan afín a mis aficiones. Lo mejor de todo es que he perdido aquella timidez casi enfermiza que frenaba mis deseos de hacer muchas cosas, porque pensaba que lo que yo sentía no le interesaba a nadie. Doy gracias a mis estupendos compañeros por haber confiado en mí y hacerme comprender que puedo aportar algo para la buena marcha de nuestro proyecto.
Alejandro me ha ayudado muchísimo a creer en mí y estamos juntos en todo este tinglado. Él como cinéfilo empedernido, se ocupa de la sección de Cine entre otras cosas y es Vice Presidente de TROTEA. Qué pena que no le hayas podido conocer más. Os hubieseis llevado muy bien y hubierais hablado de cine durante horas. Creo que él sabe más que tú.
El día 27 de Octubre celebraremos por todo lo alto y, siempre con medida, nuestro X Aniversario y estamos preparando un programa de festejos, lleno de cosas interesantes y festivas que estoy segura de que será un éxito. Lo hacemos con tanta ilusión que estoy convencida de que nos saldrá redondo.
Echaremos en falta a algunos compañeros que nos dejaron como nuestro querido Juan Valdivia, compañero de Junta y actor de nuestro grupo de teatro. Jesús Sacristán, actor también y a Quintín Cabrera que nos acompañó en el festejo de nuestro V Aniversario a pesar de su precaria salud, gesto que agradecimos emocionados. Estos, entre otros que han colaborado con nosotros y que, sin duda serán citados en nuestra Fiesta. Siempre tenemos un recuerdo de cariño y agradecimiento hacia todos ellos y creo que allá donde estén, se unirán de alguna manera a nosotros.
Papá, ¿a quién mejor que a ti podría yo contar cómo han sido estos diez últimos años? En el plano de aficiones coincidíamos tanto… En cuanto a nuestros caracteres… a veces saltaban chispas. Éramos muy parecidos.
Tengo la seguridad de que TROTEA seguirá cumpliendo años mientras sigamos unidos, sin rendirnos ante las adversidades, mientras sigamos amando el Teatro, el Cine, la Historia, la Poesía, la Cultura en general y poniendo nuestro granito de arena para que nada de esto desaparezca.
¿Quién me iba a decir a mí que en la tercera edad me iba a sentir realizada?
Sin duda, seguiré mi camino como hasta ahora: CON OPTIMISMO
Inés Soler